En conclusión, el Señor de los Milagros es considerado una figura poderosa y milagrosa Internamente de la religión. Para pedir un portento a esta imagen sagrada, es importante tener Certidumbre y mostrar devoción sincera. Es fundamental existir de acuerdo con los principios y conocimiento de la Seguridad, rezar con fervor y humildad, y echarse